Alcaldía adelantará denuncia contra hombre que agredió a un agente de tránsito con palabras racistas

Se hizo viral a través de redes sociales el ataque verbal que sufrió el agente de tránsito José Félix Angulo de placa 466 en el barrio san Fernando de Cali cuando un joven lo increpó por un comparendo por tener su vehículo mal parqueado, aunque se desconoce qué desencadenó la actitud del hombre, este reaccionó de forma agresiva y con palabras racistas.

En el video se alcanza a escuchar “hágale pues tóqueme pedazo de negro basura”.

En el momento de la discusión también el joven le cuestionó la actitud al guarda “es que como se porta es un grosero, y después cuando uno le habla feo ahí si ya quiere…no, grosero”.

El secretario de Movilidad Gustavo Orozco anunció que el equipo socio jurídico tomará medidas al respecto y rechazó lo que calificó como un acto de racismo.

“Interpondremos una denuncia ante la Fiscalía General de la Nación por los delitos de actos de discriminación agravados y por violencia contra un funcionario público. Estos delitos darían penas privativas de la libertad de hasta 8 años”.

El presunto agresor portaba la camiseta con un logo de la Industria Licorera de Caldas por lo cual, esta empresa a través de X, rechazó la agresión y aclaró que el joven no es funcionario de ellos, pero hace parte del equipo de distribución en el Valle del Cauca.

“Desde la Industria de Licorera de Caldas lamentamos y rechazamos los hechos registrados en un video que se conoció en la tarde de hoy en el que un agente de tránsito ha sido agredido en su integridad por una persona que porta una camiseta con una de las marcas de nuestra empresa.

Aclaramos que esta persona no está vinculada a la Industria Licorera de Caldas, sino que hace parte del grupo de colaboradores de nuestro distribuidor en el dpto. del Valle del Cauca. Con el distribuidor tomaremos las medidas necesarias ante este lamentable hecho”.

Y así fue, el distribuidor también se manifestó a través de un comunicado expresando que la actitud es individual y no corresponde a los lineamientos ni valores que promueve la compañía.

“Commerk S.A.S, empresa distribuidora de los productos de LA INDUSTRIA LICORERA DE CALDAS en el departamento del Valle del Cauca, rechaza la actitud inadecuada de nuestro funcionario, hechos sucedidos en la tarde de hoy en la Ciudad de Cali, donde se ve afectada la integridad de un agente de tránsito, su actitud es individual y no corresponde a los lineamientos ni valores que promueve nuestra compañía, tomaremos las medidas disciplinarias que nos corresponde”.

Además, el joven es un reconocido barman en un establecimiento nocturno, el cual también se pronunció y dijo que Alexis, como identifican al joven, no es una persona agresiva ni racista, sin embargo, él se desvinculó de toda representación pública del gastrobar.

“Como negocio, creemos en el respeto, la legalidad y el trato digno hacia todas las personas. Rechazamos cualquier comportamiento que se aleje de estos principios.

Conocemos a Alexis, y quienes trabajamos con él sabemos que no es una persona racista ni violenta, pero también entendemos que todos, como seres humanos, cometemos errores. Por esta razón, y en un gesto de responsabilidad y compromiso con las familias que hacen parte de este proyecto, él ha decidido desvincularse de toda representación pública asociada 891 Gastrobar”, reseñan en parte de su comunicado publicado en su página de Instagram.

En este caso Manuel Pineda representante de Asobares también rechazó la agresión y llamó al respeto:

“Sabemos que esta persona trabaja en el sector nocturno, pero no representa la más de 60 mil personas que somos resilientes, que brindamos alegría y que trabajamos en el servicio en la noche en nuestra ciudad. Por eso queremos ofrecerle desde el gremio disculpas a este guarda de tránsito”.

De otro lado expertos como el abogado Raimundo Tello explica que este delito puede que se presenta de forma verbal puede tener hasta ocho años de cárcel.

Dice la ley, “El que ejerza violencia contra servidor público por razón de sus funciones o para obligarlo a ejecutar u omitir algún acto propio de su cargo o realizar uno contrario a sus deberes oficiales, incurrirá en prisión de 4 a 8 años", puntualizó el abogado.

Hasta el momento el presunto agresor no ha sido detenido, pero sí está plenamente identificado.