Esto revela la IA sobre efectos invisibles de los alimentos ultraprocesados y su impacto en la salud
Le contamos todo lo que debe saber sobre esta investigación, asociada a los alimentos, la ciencia de redes y la inteligencia artificial.

Alimentos ultraprocesados. Foto: Getty Images / Anastasiia Krivenok
Para empezar, es importante acotar que, según el estudio ‘Decoding the Foodome: Molecular Networks Connecting Diet and Health’, liderado por Albert-László Barabási y publicado en ‘Annual Review of Nutrition’, existe una gran cantidad de compuestos alimentarios aún no reconocidos por la ciencia nutricional convencional, a los que se les denomina como la “materia oscura” de la nutrición.
De esta manera, Barabási, experto en física de la Universidad de Northeastern, expone cómo la combinación de inteligencia artificial, espectrometría de masas y ciencia de redes puede mapear cómo estos compuestos interactúan con las redes biológicas humanas, afectando la salud y las enfermedades.
El problema clave radica en que los sistemas actuales, como los del Departamento de Agricultura de EE. UU., solo han identificado una fracción limitada, aproximadamente 188 componentes, ignorando decenas de miles de moléculas presentes en los alimentos.
Por ende, esta omisión impide entender plenamente cómo la dieta influye en las enfermedades, especialmente aquellas no explicadas por la genética. Además, el estudio revela que los alimentos ultraprocesados rompen los patrones químicos naturales, lo cual se vincula a enfermedades modernas.
No obstante, los mecanismos moleculares que lo explican siguen siendo desconocidos. Barabási propone un proyecto de investigación para descifrar esta ‘materia oscura’, de esta forma se abriría la puerta a tratamientos y recomendaciones de dietas verdaderamente personalizadas.
¿Por qué es importante este descubrimiento?
Los hallazgos presentados en esta investigación representan un cambio de paradigma en la comprensión de la nutrición y su relación con la salud. También revelan que la composición química de los alimentos es mucho más compleja de lo que se pensaba, y que una gran parte de sus moléculas activas ha sido ignorada por la ciencia nutricional tradicional.
Esta ‘materia oscura’ alimentaria, identificada por Albert-László Barabási y su equipo, desafía la visión reduccionista que ha dominado el estudio de la dieta durante el siglo XX, basada en nutrientes aislados.
Su importancia radica en que, en la actualidad, enfermedades como la obesidad, la diabetes tipo 2 y las cardiovasculares están en aumento, y no pueden explicarse completamente desde la genética.
Al integrar la dieta en un enfoque de medicina de redes e inteligencia artificial, se abre la posibilidad de entender estas enfermedades en función de complejas interacciones moleculares. Asimismo, los métodos actuales permiten vincular compuestos alimentarios específicos con procesos biológicos, también mediante inteligencia artificial, lo que sienta las bases para terapias nutricionales más precisas.
Del mismo modo, en una época donde los alimentos ultraprocesados predominan y los hábitos alimentarios se han distanciado de lo natural, estos hallazgos ofrecen una vía crítica para redirigir la salud pública hacia estrategias basadas en evidencia más precisa.
La alimentación y las enfermedades
Tenga en cuenta que las moléculas alimentarias no deben analizarse de forma aislada, sino dentro del contexto de sus múltiples interacciones.
La investigación de Barabási subraya que los compuestos dietéticos actúan en redes complejas, y que su influencia en la salud depende de cómo se relacionan entre sí y con nuestras proteínas celulares y ADN.
Finalmente, vale la pena hacer énfasis en que los patrones químicos de los alimentos naturales son consistentes, y que sus alteraciones, típicas del procesamiento industrial, podrían ser una clave para comprender el origen molecular de muchas enfermedades modernas.